Una piscina en casa

Si estas pensando en instalar una piscina en casa, es imprescindible plantearse éstas preguntas. Muchas de ellas te responderán en las tiendas especializadas, donde los profesionales disponen de recursos y soluciones para todos los casos.
Debemos tener en cuenta algo más que el modelo y el precio, debemos de pensar en que lugar queremos hacer la obra, o bien si lo que queremos es instalar un modelo pre-fabricado, decidir el revestimiento interior, ajustarse al presupuesto…
Antes de comenzar las obras debemos buscar la supervisión a profesionales y solicitar la aprobación por el ayuntamiento. Al excavar el agujero de la piscina, lo más importante es que el terreno esté bien nivelado, que no sea rocoso y que la zona sea de fácil acceso para la grúa.

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Durante la fase de construcción se instala la mayoría de elementos que permitirán un correcto funcionamiento de la piscina: accesorios de fontanería, sistema de depuración, iluminación, escaleras. Si escoges un sistema de depuración clásico, puedes destinar un espacio en el jardín para alojar el equipo técnico. A continuación debemos de decidir si queremos que sea de obra o prefabricada. En cuanto a los materiales de construcción, la piscina de obra ofrece un resultado sólido y un acabado perfecto. La otra opción es la prefabricada, que tienen una estructura de acero y un revestimiento impermeable compuesto de polivinilo y resultan más económicas.

A la hora de determinar la zona donde instalaremos la piscina, es interesante que examinemos los movimientos del Sol, en todas las épocas del año. La mejor ubicación de la piscina suele ser hacia al suroeste, porque normalmente se aprovechan las mejores horas de Sol. Debemos evitar la sombra que puedan existir, por ejemplo la de los arboles si los hubiera, ya que estas provocarían el enfriamiento del agua.

También debemos valorar el tamaño de la piscina, según el uso debemos de elegir un tamaño u otro. Si solo queremos darnos un baño con unas dimensiones de entre 20 y 32 metros cuadrados será suficiente, pero si quieres algo más que darte un remojón, habrá que incrementar los metros cuadrados entre 32 y 50. En cuanto a la profundidad, lo más usual es que el suelo de la piscina tenga entre 1,20 y 2 metros. Ten en cuenta que a mayor profundidad, mayor es el coste de la construcción y el mantenimiento.

Por ultimo y a modo estético, y no menos importante, debemos de ambientar el entorno de la piscina; una escalera para entrar y salir, plantar estratégicamente algún árbol para que de sombra, y ayude a parar el viento, colocar césped artificial alrededor de la piscina.

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